Lo mejor de dos mundos: barra y restaurante.
Situado en pleno Eixample, en el centro de Barcelona, Malparit aterriza en Córcega para hacerse notar. El local se reparte en dos zonas: la barra para los más desenfadados, que prefieren picar y moverse rápido, y el restaurante para los que quieren quedarse un rato más y disfrutar de una experiencia más relajada. Dos cocinas abiertas, dos ambientes, pero siempre con el producto más fresco del mercado.
Un espacio formal para los más exigentes y otro más informal para disfrutar sin prisas
En nuestra barra, todo tiene un toque de desenfado. Un espacio informal donde el ambiente es relajado, pero la calidad es máxima. Ostras frescas y pescados expuestos en una vitrina, joyería de la fina. Y siempre con una caña bien fría para acompañar. Aquí, el tapeo se disfruta como en casa, pero con una calidad que va más allá
Además, contamos con cocina abierta y un espacio único para cocinar al fuego, con leña y brasa, para que el sabor sea aún más auténtico. Una cocina que respeta lo tradicional y la artesanía, pero con la frescura de siempre para hacer d’allò més bó.
Un tragaluz en medio de la Eixample.
En el restaurante, cada mesa está pensada para que disfrutes, sin prisas, de platos elaborados como se merecen. Con un ambiente relajado, una cocina abierta propia y un tragaluz que inunda de luz natural el corazón del Eixample, aquí se viene a comer bien, a tu ritmo y con ese rollo carismático que nos hace únicos.
El espacio fusiona un diseño neo-castizo catalán, obra del estudio Genialidades, que convierte cada rincón en un reflejo de su esencia: auténtico, con personalidad y con un toque divertido.
